El abogado Alejandro Nissen, asesor jurídico de la Essap, observa la conexión clandestina hallada el viernes 15 de febrero, en Lambaré.
Todas las evidencias recogidas el pasado viernes en la intervención fiscal a una conexión clandestina en Lambaré que robaba agua de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay S.A. (Essap) para distribuirlo a sus clientes, apuntan a la aguatera privada ESCA S.A., de propiedad de Antonio Espínola, un ex funcionario de empresa sanitaria estatal.
El ilícito está tipificado como hurto de agua y es pasible de penas privativas de libertad de hasta 5 años o multa. El caso está en manos del fiscal Nelson Ruiz, de la Unidad N° 3, de Lambaré. La Essap solicitará un castigo ejemplar considerando el daño patrimonial a la empresa y los inconvenientes que se causan a los usuarios, sostuvo Alejandro Nissen, asesor jurídico y responsable de la investigación que develó el presunto ilícito.
En los medios de comunicación, Antonio Espínola negó la acusación y derivó la responsabilidad en el propietario de la vivienda que estaba conectada a la red de la Essap.
Sin embargo, la investigación realizada por la Essap y el procedimiento efectuado el pasado viernes 15 de febrero del corriente año demuestra que la interconexión detectada suministraba agua a los usuarios de ESCA S.A.
Se dejó constancia que al cerrar la llave de paso de la conexión clandestina varios usuarios de la aguatera privada quedaron desabastecidos. Dicha interconexión fue eliminada y los materiales retirados se encuentran en resguardo de la Essap para su entrega a la Asesoría Jurídica como elemento probatorio del hecho.
También se tomó prueba de los tipos de agua, confirmándose que el agua de Essap S.A. contiene cloro y el del agua de ESCA S.A. no contiene este elemento. Se dejó constancia del mismo en el acta del Ministerio Público.
Con el acompañamiento del Ministerio Público se realizó un relevamiento de usuarios afectados por la falta de agua al momento de eliminar la conexión irregular detectándose un total de 7 casas que quedaron sin suministro de agua.
Los propietarios y moradores recibieron formularios de la Essap para gestionar su incorporación a la empresa estatal.
Además se pudo comprobar que toda la red de agua de ESCA S.A. quedó con muy baja presión de agua.
Para determinar un consumo presunto de la conexión irregular y cuantificar el daño se midió la presión de la red de agua en el punto de la interconexión.
La aguatera privada ESCA S.A., ubicada en Lambaré, fue intervenida el pasado viernes. Esta empresa interconectaba de manera irregular su red de agua a la de Essap, utilizando una conexión directa en la propiedad de César Benítez Ortega, usuario de Essap.