El aspecto y olor desagradables provenientes de los residuos cloacales se están volviendo un problema del pasado para los comerciantes y clientes del Mercado Municipal de Luque quienes hace décadas venían quejándose ante el colapso del sistema de alcantarillado sanitario que data del año 1975.
La Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay S.A. (Essap), está desplegando todo su arsenal de maquinarias pesadas para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Retroexcavadoras, tractores y un ejército de cuadrilleros trabajan para que el mercado recobre su buena imagen de antaño.
Natalicio Chase, titular de la Essap, verificó el avance de las obras concernientes a la rehabilitación de los colectores cloacales, una inversión que supera los G. 1.000 millones y que se desarrolla en conjunto con la Municipalidad de Luque. Resaltó además que de haberse llegado a tercerizar los trabajos, el presupuesto se habría disparado, pero que gracias a la modalidad desplegada se ahorró al menos 60% del presupuesto.
“Hace 20 años que veníamos golpeando puertas y sólo recibíamos promesas; el problema se fue agravando y con eso espantando a los clientes. Tras concluir los trabajos, creemos que se revitalizarán las compras y habrá más circulante”, comentó Celestina López de Barreto, una de las comerciantes de la zona.
En esta línea, el titular de la Essap agregó que se trata de una obra muy sensible para la población, más teniendo en cuenta que existen decenas de negocios vinculados a la gastronomía, de ahí la celeridad y gran plantel de funcionarios –alrededor de 50- para que los trabajos sean culminados en un plazo de 20 días, dependiendo del clima.
Se trata de una obra de gran complejidad que abarca la provisión y colocación de unos 350 metros de tuberías nuevas con mayor capacidad de recolección pasando de 200 a 300 milímetros, agregó al respecto Néstor Roa, de la Gerencia de Alcantarillado.
A su vez, Gregorio Morel, otro de los vecinos de la zona no escondió su alegría al ser consultado sobre los trabajos encarados. “Ya casi habíamos perdido la esperanza de recuperar estos espacios, las aguas negras daban un muy mal aspecto aparte de ser un posible foco de enfermedades”, apuntó.
De acuerdo a los datos que maneja el intendente de la ciudad, Carlos Echeverría, son entre 40 y 50 mil las personas que circulan al mes por las zonas de influencia sobre las calles Moisés Bertoni entre Capitán Bado y 14 de Mayo y Capitán Bado entre Humaitá y Bertoni.
Finalmente, el presidente de la ESSAP apuntó que de ahora en más los grandes comercios, como supermercados deberán ajustarse a las normativas en cuanto a tratamiento de residuos cloacales de modo a que los trabajos tengan una mayor vida útil. También se anunció un mayor control sobre éstas empresa.